Desde el momento en que entró en vigor la Ley Bitcoin, según datos del gobierno, más de 3 millones de personas bajaron la Chivo Wallet seducidos por la oferta de acceder a un bono de 30 dólares que el gobierno ofreció a cada ciudadano que instalara la cartera digital.
Sin embargo, lo que el ministro de hacienda Alejandro Zelaya destacaba como uno de los puntos fuertes de la chivo wallet, tener que registrar el dui del usuario para poder usar la cartera digital, acabó convirtiéndose en uno de los talones de aquiles de la app ya que, aunque se exigiera el registro del número de dui del ciudadano, no fue creado ningún mecanismo que permitiera la verificación de identidad, lo que obviamente abrió la puerta para el fraude y el robo de identidad.
Fraude, porque alguien que maliciosamente usó el dui de otra persona, también recibió el bono de los 30 dólares prometidos por el presidente Bukele y al mismo tiempo robó la identidad de la persona al usar su dui indebidamente.
El gobierno por su parte, en su prisa por lanzar la chivo wallet el siete de septiembre, obvió este “pequeño detalle”, creando un problema acerca del cual ahora no quiere asumir la debida responsabilidad.
¿Pero qué tan serio puede ser para alguien que usen su dui para realizar transacciones? Pues les explico. Imaginemos la situación hipotética de alguien que instala la chivo walle y comienza a movimentar cantidades de dinero en el límite diario y mensual (de mil y 30 mil dólares respectivamente) permitido por la chivo wallet. Pues hasta ahí nada de malo, el problema surge evidentemente cuando el usurpador de la identidad pasa a usar la chivo wallet para realizar actividades ilícitas, como por ejemplo la venta de drogas usando la chivo como medio de pago, pero con la identidad de un tercero.
Imaginemos que el gobierno consigue raestrar esas operaciones y descubre que hay una chivo wallet instalada por Juan Pérez que está realizando una serie de transacciones diarias de menudeo y al final del día el dinero es descontado en un cajero chivo. Lo natural en un caso como este es pensar que esta persona no está vendiendo mango cumbia sino que eventualmente podría estar dedicándose a actividades ilícitas, lo que por si solo ya es un problema. Pero mayor es el problema para el pobre ciudadano que no sabe quien usó su dui para instalar la chivo wallet y ahora corre el riesgo de tener a la policía en frente de su casa pidiéndole explicaciones sobre las frecuentes transacciones seguidas de un descuento en efectivo en el cajero chivo.
No es necesario elaborar mucho a este respecto para que el lector entienda que este problema es muy serio y que podría acarrearle serias consecuencias a la víctimas de este fraude.
Dicho esto me gustaría hacer algunas recomendaciones:
1. Que el gobierno abra un canal para poder denunciar el robo de identidad através de la chivo wallet.
2. Que aquellas wallets que han sido instaladas usando un dui de manera fraudulenta sea bloqueadas mientras el ciudadano no se presente ante alguna autoridad competente para la debidad verificación de identidad.
3. Que todas las transacciones y su respectivo saldo de las chivos wallets donde se ha hecho un uso fraudulento de un dui sean congelados y confiscados por el gobierno.
4. Que las personas que han sufrido robo de identidad se presenten a las autoridades competentes para que la identidad sea corroborada através de la presentación del dui y la verificación en la base de datos de la chivo wallet de la identidad del denunciante.
El robo de identidad va mucha más allá del bono de treinta dólares y puede traerle serias consecuencias a las víctimas. Cabe el gobierno tomar cartas en el asunto para corregir esta grave falla.