Después de casi tres semanas de haber entrado en vigor la ley bitcoin en El Salvador centenas de personas se aglomeraron en los cajelos chivo formando largas filas. De igual forma el presidente Nayib Bukele anunció con bombo y platillo que 1.6 millones de personas ya bajaron la chivo wallet, o sea, el equivalente a 25% de la población residente en el país estaría usando la chivo wallet.
De ser verdadera esa información cabe preguntarse algunas cuestiones importantes. Por ejemplo, ¿todas esas personas están realmente interesadas en la chivo wallet y en el bitcoin como moneda de curso legal? ¿O será simplemente que su único objetivo es sacar los 30 dólares que el gobierno está “regalando” y después de ello se olvidarán de la chivo wallet?
Pero no sólo eso, si 1.6 millones de personas ya bajaron la chivo wallet eso implica también que ya fueron entregadas aproximadamente 981 bitcoins, un valor superior a los 700 bitcoins que el gobierno anunció que había adquirido. De dos una, o el gobierno miente al decir que 1.6 millones de personas ya bajaron la chivo wallet, o el gobierno ha adquirido más bitcoins que aquello que ha anunciado.
De igual forma es importante recordarle a los lectores que esos bitcoins ya no están en manos del gobierno ya que le fueron entregados a la gente. Si los números no mienten, en este momento el país, sólo en bitcoins entregados a la gente en la forma de forma de un bono de US$30, el país ya gastó más de 48 millones de dólares. Hay que recordar que el gobierno aprobó en la Asamblea 230 millones de dólares para implementar la ley bitcoin, de los cuáles, como ya dijimos, por lo menos ya se gastaron 48 millones sólo en el bono, ¿pero cuanto se ha gastado hasta este momento en los cajeros chivo, en toda la propaganda estatal, logos, costos de implementación de la chivo wallet, consultoría internacional, en el personal que está dando orientaciónes en los cajeros chivo por todo el país? Dado el alto nivel de oscurantismo en el gobierno Bukele es imposible estimar esas cifras, pero lo que sí queda claro es que la Ley Bitcoin le está costando al país millones de dólares.
Vale recordar que el fideicomiso fue creado con una cláusula que le permite al gobierno adquirir más deuda para continuar comprando bitcoins, ya sea para entregarlos en la forma de un bono de 30 dólares, o para recomprar bitcoins que la gente no quiera mantener en sus carteras digitales para evitar la volatilidad.
Como cualquier persona sensata podría imaginarse, la gran mayoría de nuestra población no entiende por qué el presidente Bukele ha introducido el bitcoin como moneda de curso legal. Pero lo que sí entiende es que los $30 le serán muy útiles para saciar el hambre, ni que sea por apenas un par de días.